"La vida sería imposible si todo se recordase. El secreto está en saber elegir lo que debe olvidarse."

09 noviembre 2013

 
 
 
 
 
 
El día había comenzado bien. Nada hacía prever que no iba a terminar del mismo modo y es que hay veces que a las circunstancias les gusta jugar contigo y enseñarte la otra cara de la Luna, la obscura, la que nadie alcanza a ver hasta que ocurren las inesperadas casualidades. 
Cuando nada has hecho mal te falta esa sensación de no haber cruzado la línea y sin embargo te queda el sentir...amargo, doloroso, de que podías haberlo evitado; una palabra menos, un silencio mas y todo hubiera sido diferente. Y es que nunca he sido tibia y quizás sí demasiado confiada pensando que los demás entienden las cosas como yo. Ya no hay tiempo, ya de nada sirve lamentarse, ya se ha quedado el dolor de la incomprensión con intención de no marcharse.
 
La incomprensión...esa lluvia de injusticia que empapa tu alma y te deja los sentimientos helados. Lluvia imparable que no te deja avanzar y lo empapa todo de silencio.
No habrá reproches, ni explicaciones, ya no importan los porqués ni que otros te miren con la sonrisa sarcástica mostrando un blanco mensaje cargado de venganza. Ya no importa.
 
Toca buscar en el armario de tu honestidad la coraza que defienda tu interior, que proteja todo aquello en lo que crees, evitando que las cosas no te lleguen para que no duelan. La distancia...
 
Y la lluvia cae, impasible.
 
 
 
 
 
Gracias Cristina porque siempre encuentro una imagen que muestra mi alma.